domingo, febrero 26, 2006

FECUNDACIÓN Y GENÉSIS DEL PRIMATE

A veces me pongo a pensar en retrospectiva, me detengo en el punto de partida de toda esta mierda, en el momento inicial, es decir, en el coito-golpe de suerte de mis padres que arrojo como mediocre resultado el nacimiento de este orangután miserable que soy en el presente.

Pasa por mi cabeza una conclusión fácil y evidente, esto es, fui, entre millones, un espermatozoide triunfador. Este análisis me deja un extraño sinsabor, habida cuenta de que soy un chimpayate bueno para nada con Phd en inutilidad, y que por lo general no hago nada por mis propios medios, es común hallarme delegando mis responsabilidades en otras personas, por lo general en los progenitores, quienes en su calidad de congéneres sanguíneos en línea directa, se han visto obligados a acatar con ceño fruncido las recargas de trabajo que mi prolija inutilidad les otorga. Teniendo en cuenta esto, solo me resta pensar dos cosas: primero, que los otros espermatozoides eran una sarta de renacuajos gordos y mediocres, o segundo, y creo que es la opción más plausible, que HICE TRAMPA.

Si, hice trampa para llegar al premio gordo de esa lotería sexual que es el ovulo. Ahora la pregunta es que técnicas se usaron para lograr este propósito, para lo que se han propuesto las siguientes posibilidades:

1. Creo que al verme perdido en ese maremagnum de esperma y carne vaginal, corrí una voz de alarma, hice entrar a mis compañeros espermatozoides en pánico con el grito de confusión ¡ESTAMOS EN EL ANO!.

2. Me hice amigo del más atlético de los renacuajos y me hice pasar por minusválido (tal vez me había fracturado mi cola espermática), y cuando estábamos ya en el ovario y avistábamos el ovulo, lo asesine a sangre fría.

3. Esta es una variación de la anterior, simplemente vi que era imposible el alcance del ovulo, por lo cual tomé la muy homosexual decisión de fecundar a mi amigo espermatozoide, lo cual explicaría muchas cosas, como por ejemplo porque a estas alturas soy un esperpento y una completa abominación de la naturaleza.

También hay otras posibilidades que se me ocurren para explicar el porque de este nefasto resultado, como por ejemplo que mi padre, el día de la fecundación, se encontraba alicorado o bajo el influjo de alguna sustancia alucinógena o psicotrópica. Existe la posibilidad (oculta, eso si) de que mi madre halla fumado durante el periodo de gestación. También se me ocurre que simplemente los otros espermatozoides eran absoluta y completamente retrasados mentales, ya que bien visto y sin mucho detenimiento, es una línea muy delgada la que me separa de ser un tarado (creo que tal vez lo soy, los rasgos físico me delatan como Down).

Este fue el estudio de mi génesis, la de este primate que soy, ahora solo resta ver que puede resultar de mis infructivas y por lo demás prácticamente inexistentes prácticas reproductivas y sexuales. Por lo demás creo que debido a mi adolescencia prolongada y al abuso del onanismo, tengo un conteo de esperma bastante bajo. Hasta la próxima, por ahora creo que voy a poposear.

sábado, febrero 25, 2006

AHORA SÍ MALDITA SEA

Pero que hijueputas? por que no se le puede poner titulo a esta mierda?

maldita sea Pino que template mas mediocre....

Hay que arregalrla